Es necesario leer antes las reglas de tercios ya visto en CGsign para complementar el tema.
Los centro de interés visual son puntos de interés que se crean en el fenómeno de la percepción visual humana y la búsqueda de nuestra mente de un mensaje en lo percibido, que definimos como interpretación.
Cualquier imagen puede tener un centro de interés visual, pero no hay que caer en el error del fotógrafo principiante que confunde centro de interés con punto de fugas y perspectiva, ángulos abiertos u cerrado. El centro visual es el climax del interés de una imagen, visualmente hablando es donde su tema principal confluye (Algo visto en los ordenamientos de la Gestalt Figura-fondo):
La última cena de Leonardo da Vinci es un buen ejemplo de la antigüedad sobre el manejo del interés en un cuadro, donde la imagen es en un formato tal que tiene diversos centros de interés visual, lo que acaba con el mito de que una foto o imagen solamente debe tener un centro de interés visual:
En realidad una imagen o fotografía pueden tener diversos centros de interés, pero un tema común que se cohesiona en un único centro de interés, imagine una manifestación donde hay una lucha entre policías y civiles, habrá diferentes centros de interés (Contrastes), pero dado que la manifestación y la confrontación de la policía abarca todo el contexto (Relación figura-fondo), hay una correlación implícita que formará un centro de interés que cohesionará la imagen sumada a la intencionalidad de quien fotografía
Un paisaje, una imagen naturalista a su vez puede tener un centro de interés difuso, sin coherencia, casi anecdótico, a pesar de buscar la perspectiva, el adecuado ángulo de color, pues es incapaz de relacionar los elementos, contar una historia, los centros visuales se relacionan con el movimiento o la ilusión del mismo, como un objeto detonante del tema, el fondo por sí mismo carece de centros de interés:
Los puntos de mayor tensión visual existen en la imagen como el clímax de una idea. La potencia de la imagen no se logra por uno ojos más brillantes o una estética armoniosa, es reconocer e identificar el lenguaje de la realidad y transportarlo en una imagen, el soldado llorando nos cuenta una historia, cautiva la atención y el pensamiento:
Hay centros de interés naturales y poderosos que capturan la atención del hombre sin mucho esfuerzo que pueden ser bien aprovechados (el poder de los ojos y labios) gracias a su tendencia a crear empatia (alegría, tristeza), rechazo (indignación, molestia), en la foto observamos que la señora enfoca su interés en una forma indefinida, mientras que los que le rodean a ella la hacen el centro de interés, que de forma clara nos informa del contexto:
Un fotógrafo tiene más posibilidades de crear un centro de interés usando la cara franca de una persona, que de otra persona cubierta con una máscara y lentes, los gestos, las muecas y la mirada son grandes elementos que dan contexto a la imagen, la perspectiva y las aberraciones visuales son formas que fuerzan la tendencia sobre un punto de interés, en la imagen de abajo vemos una aberración visual cuyo impacto se origina en su anómala composición donde se aprecia el desequilibrio y la falta de gravedad:
Por otro lado, hay quien en una búsqueda vanidosa y pretenciosa de artista de primaria no llega a ningún lado y es torpe al crear interés, sólo por el hecho de que algo sea estético, no significa que posea un centro de interés, al menos uno que los demás entiendan:
Para aprender a manejar los centros de interés, no es necesario concentrarse en buscarlos o usar reglas fotográficas demasiada rebuscadas, lo importante está en digerir el contexto en que te mueves, reconocer y manejar la antelación o forma en que se desenvuelven los eventos, ir al lugar del suceso y perseguir la acción o simplemente sentarte y documentarte y reflexionar sobre que quieres decir, en el peor de los casos hacer lo que se hace en la foto de arriba, una composición visual sólo por el hecho de buscar una estética, que finalmente es fallida.
Los centro de interés visual son puntos de interés que se crean en el fenómeno de la percepción visual humana y la búsqueda de nuestra mente de un mensaje en lo percibido, que definimos como interpretación.
Cualquier imagen puede tener un centro de interés visual, pero no hay que caer en el error del fotógrafo principiante que confunde centro de interés con punto de fugas y perspectiva, ángulos abiertos u cerrado. El centro visual es el climax del interés de una imagen, visualmente hablando es donde su tema principal confluye (Algo visto en los ordenamientos de la Gestalt Figura-fondo):
La última cena de Leonardo da Vinci es un buen ejemplo de la antigüedad sobre el manejo del interés en un cuadro, donde la imagen es en un formato tal que tiene diversos centros de interés visual, lo que acaba con el mito de que una foto o imagen solamente debe tener un centro de interés visual:
En realidad una imagen o fotografía pueden tener diversos centros de interés, pero un tema común que se cohesiona en un único centro de interés, imagine una manifestación donde hay una lucha entre policías y civiles, habrá diferentes centros de interés (Contrastes), pero dado que la manifestación y la confrontación de la policía abarca todo el contexto (Relación figura-fondo), hay una correlación implícita que formará un centro de interés que cohesionará la imagen sumada a la intencionalidad de quien fotografía
Un paisaje, una imagen naturalista a su vez puede tener un centro de interés difuso, sin coherencia, casi anecdótico, a pesar de buscar la perspectiva, el adecuado ángulo de color, pues es incapaz de relacionar los elementos, contar una historia, los centros visuales se relacionan con el movimiento o la ilusión del mismo, como un objeto detonante del tema, el fondo por sí mismo carece de centros de interés:
Los puntos de mayor tensión visual existen en la imagen como el clímax de una idea. La potencia de la imagen no se logra por uno ojos más brillantes o una estética armoniosa, es reconocer e identificar el lenguaje de la realidad y transportarlo en una imagen, el soldado llorando nos cuenta una historia, cautiva la atención y el pensamiento:
Hay centros de interés naturales y poderosos que capturan la atención del hombre sin mucho esfuerzo que pueden ser bien aprovechados (el poder de los ojos y labios) gracias a su tendencia a crear empatia (alegría, tristeza), rechazo (indignación, molestia), en la foto observamos que la señora enfoca su interés en una forma indefinida, mientras que los que le rodean a ella la hacen el centro de interés, que de forma clara nos informa del contexto:
Un fotógrafo tiene más posibilidades de crear un centro de interés usando la cara franca de una persona, que de otra persona cubierta con una máscara y lentes, los gestos, las muecas y la mirada son grandes elementos que dan contexto a la imagen, la perspectiva y las aberraciones visuales son formas que fuerzan la tendencia sobre un punto de interés, en la imagen de abajo vemos una aberración visual cuyo impacto se origina en su anómala composición donde se aprecia el desequilibrio y la falta de gravedad:
Por otro lado, hay quien en una búsqueda vanidosa y pretenciosa de artista de primaria no llega a ningún lado y es torpe al crear interés, sólo por el hecho de que algo sea estético, no significa que posea un centro de interés, al menos uno que los demás entiendan:
Para aprender a manejar los centros de interés, no es necesario concentrarse en buscarlos o usar reglas fotográficas demasiada rebuscadas, lo importante está en digerir el contexto en que te mueves, reconocer y manejar la antelación o forma en que se desenvuelven los eventos, ir al lugar del suceso y perseguir la acción o simplemente sentarte y documentarte y reflexionar sobre que quieres decir, en el peor de los casos hacer lo que se hace en la foto de arriba, una composición visual sólo por el hecho de buscar una estética, que finalmente es fallida.
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